Logramos tener en nuestras manos la primera edición del texto Dealing with Complex System Problems (2020). Luego de un largo periplo iniciado en Holanda, con escalas en Chicago y Miami, ¡Al fin nos llegó el libro del profesor Alexander de Haan!. La promesa de su portada es que se trata de un libro-guía, pleno de herramientas y habilidades de pensamiento para la toma de decisiones, útil para estudiantes, consultores y gerentes.
Alexander, quien ha creado y enseña muchos cursos sobre el tema, tanto en línea como presenciales, para universidades, escuelas de negocios y empresas, nos presenta ahora su visión práctica de cómo enfrentar las situaciones que surgen cuando se asume la responsabilidad de liderar de alguna forma situaciones complejas. El problema de fondo está lejos de referirse a ir resolviendo los incidentes que surgen dia a dia, el verdadero reto se encuentra cuando la solución a un problema no es evidente, es algo que no se puede hacer con tan solo lógica o experiencia. Es aquí cuando se requiere análisis para definir el problema y las opciones para atacarlo, escoger una entre estas últimas, e implementarla. De esto trata el libro.
Se parte de la base que las situaciones complejas involucran muchas personas, grupos y organizaciones simultáneamente, quienes a su vez interactúan en forma combinada y en diversas proporciones de habilidades, conocimiento, experticia y experiencia a su interior y entre las diferentes estructuras, con sus tecnologías y sociologías, estadísticas y valores, y todas van a coincidir en el mismo espacio-tiempo, conformando así un sistema dinámico. La reunión de estos sistemas, complejos por naturaleza, lleva a la generación de ambientes que deben ser analizados cuidadosamente si se pretende modificarlos positivamente, para lograr los fines últimos de la sociedad, la empresa o grupo social que los trata de enfrentar.
Afortunadamente las diferentes perspectivas generadas por las múltiples individualidades, los grupos y las organizaciones, pueden enriquecer la visión general del problema, ayudando a su solución a pesar de los desacuerdos y retrasos en los procesos decisorios. Si a lo anterior unimos la necesidad de un manejo diferenciado entre los “actores” (los verdaderamente involucrados) y los espectadores (a quienes llaman “informantes” en el texto) podemos apreciar la riqueza que puede dar al análisis la participación organizada inteligentemente.
La idea del libro es ayudar a quien lo siga a enfrentar y manejar problemas complejos, mediante una aproximación sistemática y la introducción de conceptos que ayudan a observar, obtener datos, combinar estos datos y utilizar los resultados. Partiendo desde la perspectiva de los actores y el uso de informantes para definir la situación compleja, para luego representar esa situación y definirla, se crea una versión manejable mediante el uso de modelos conceptuales para así poder organizar de manera lógica, coherente y, quizás lo mas importante, transferible. El modelo también ayuda a definir límites para tener claro cuáles partes de la realidad deben ser consideradas y cuáles no.
Una vez establecido el modelo es posible establecer relaciones causa-efecto para entender como funciona el sistema complejo bajo estudio, de manera de poder identificar caminos para mejorar o resolver el problema que se enfrenta, al tiempo que se gana experiencia en como escoger entre alternativas. Lo cual conduce a la necesidad de manejar la incertidumbre a través de escenarios y así poder explicitar esas incertidumbres y comparar las alternativas, para ir construyendo los futuros deseables.
Un hecho original es que el autor te hace saber su dirección en linkedin de manera que te mantengas en contacto como lector de su libro y le vayas haciendo saber como te va en el desarrollo del programa. Muy original y útil, le estaremos comunicando nuestra experiencia a medida que avanzamos. Invitamos a nuestros lectores en esta bitácora a mantenerse en contacto para construir, colaborativamente, modelos que nos ayuden a resolver problemas complejos en nuestra sociedad.
Henry de Jesus Vazquez
agosto 12, 2020Interesante por demás la lectura, que deja inquietudes en diversos aspectos, entre ellos: la selección de un modelo racionalmente aceptable y la necesaria capacitación previa que deberían tener los integrantes (actores) para manejar las diferentes etapas de los procesos
Pablo Vicente Ojeda Pacheco
agosto 16, 2020Mi opinión tiene que ver con el última idea del mapa conceptual, donde se habla de herramientas analíticas y se incluyen la generación de relaciones de causa-efecto. A este respecto, deseo comentar que los problemas sociales son problemas (una gran mayoría) complejos y requieren de abordajes epistemológicos diferentes. Por ejemplo, el que nos permite el «constructivismo social».