El trabajo del investigador suele tener una audiencia específica: las publicaciones arbitradas que le permiten al profesor subir en el escalafón universitario y obtener mayor prestigio y beneficios salariales. Pero el de las publicaciones arbitradas es un sistema cerrado, que llega poco o con dificultad a públicos más amplios, públicos que pueden estar ávidos de nueva información, conocimiento y soluciones a sus problemas.
Como todo sistema cerrado, el de las publicaciones arbitradas y escalafones tiene prácticas y estilos que no necesariamente respondan o funcionen fuera del sistema, frente a un público más amplio. Son muchas las investigaciones y los trabajos que merecen y están esperando el encuentro con ese público.
Escribir para una publicación arbitrada es bastante distinto que hacerlo para un público mucho más variado. Esa variedad trae consigo el gran reto de mantener el equilibrio necesario entre rigurosidad académica y amenidad. Además, obliga al investigador a mirar su trabajo de una manera completamente distinta, desde el punto de vista del posible lector, uno que quiere conocer del tema, abordarlo sin ser experto, mientras se sorprende y disfruta de la lectura.
Para publicar en revistas arbitradas, también para presentar trabajos de ascenso, se debe pasar por el filtro de los árbitros y jurados calificados, que según su criterio y conocimiento evaluarán al investigador. Para publicar en otro tipo de revistas o para publicar libros, también es necesario pasar por el criterio y conocimiento de personas entrenadas para divulgar ideas y contenidos de manera ágil, profunda, interesante y entretenida.
Por eso, vale la pena trabajar los textos de la mejor manera posible para que las personas los reciban con interés y respondan con entusiasmo a la lectura.
¿En qué puede ayudar un servicio editorial?
Un investigador que quiera mostrarle sus trabajos a una audiencia más amplia, puede acompañarse de editores profesionales que le ayuden a preparar su texto para esa audiencia.
Este acompañamiento puede comenzar incluso desde la pregunta de cómo convertir la investigación o la tesis en un libro de divulgación no académico; luego continúa durante la escritura sugiriendo nuevos pasajes, secciones a profundizar y fragmentos susceptibles de ser eliminados; y termina con correcciones y ediciones de estilo y prueba, hasta el momento mismo de entregar el texto trabajado y listo a una imprenta o servicio de publicación digital.
En el buen acompañamiento editorial está la clave para que muchas buenas investigaciones se conviertan también en excelentes publicaciones, que ayuden a la difusión más amplia del trabajo del investigador, para beneficio no solo personal de este, sino de lectores y comunidades a las que el nuevo conocimiento pueda serles útil.
Enzo
mayo 20, 2021Muy importante esta nota de Luis Alejandro Ordóñez. No es un trabajo fácil este de convertir conocimiento científico en conocimiento para la difusión masiva. Y hay poca gente que se especialice y que asesore en ello.
Me gustaría saber qué puede hacer alguien que quiera convertir su obra publicada en revistas especializadas en libros o blogs de alta difusión. O sea, a dónde acudir.
Gracias.
Luis Alejandro Ordóñez
mayo 20, 2021Hola, Enzo, gracias por comentar. Sí, es un trabajo muy específico que necesita una mirada editorial distinta a la que un investigador o un árbitro evaluador tienen. Por experiencia me he encontrado que la escritura académica suele pasar de largo o subestimar al menos dos cosas que pueden funcionar muy bien en la difusión masiva: una son las anécdotas detrás de la investigación, que obligan al investigador a verse a sí mismo como personaje de la historia, un cambio de paradigma radical, pero que abre las posibilidades narrativas de muchas maneras. La otra, la posibilidad de que la suma de las partes sea más que el todo, una investigación o una tesis son vistas como unidades completas, pero a la hora de presentarlas en otros escenarios distintos al académico, bien pueden funcionar por partes, como fragmentos o episodios a los cuales se les dé una estructura de inicio, desarrollo y final. En vez de publicar la tesis completa, publicar tres o cuatro artículos y un par de libros del trabajo desarrollado en la tesis. Yo estoy trabajando en ello, quedo a la orden. Saludos
Enzo
mayo 21, 2021Gracias, Luis Alejandro.
Éxito con su propuesta.
Tendré en cuenta su disponibilidad. Eventualmente, me gustaría conocer más sobre la modalidad de sus servicios.
Luis Alejandro Ordóñez
mayo 30, 2021Estoy a la orden. Mantengamos el contacto.
Paul ESqueda
mayo 20, 2021Las mejores revistas academicas (top journals) tienen los mejores arbitros (leading science, engineering, business, humanities or social researchers), esto se traduce en excelencia academica, de eso no hay ninguna duda. Ciertamente es un sistema bastante cerrado. No obstante hay muchos autores, journals, y editores de libros que traducen «groundbreaking research» a un lenguaje mas accesible al público. Los medios y las revistas de las asociaciones profesionales juegan un rol muy crítico en este proceso.
En Venezuela siempre me imprionó el periodismo científico (Círculo de Periodismo Científico de Venezuela) por el trabajo que hacian en llevar la complejidad de la ciencia a la prensa.
Mi experiencia en Venezuela y particularmente en el IVIC, es que las publicaciones reciben muy poca atención y no se traduce lo suficiente al público. Podría explicar el financiamiento marginal que recibe la ciencia. Aquí en USA es casi todo lo contrario, hay de todo libros, revistas y articulos de prensa en todos los niveles (para el público especializado o el público en general).
Enzo
mayo 21, 2021Arístides Bastidas, pionero.
Luis Alejandro Ordóñez
mayo 30, 2021Gracias por comentar, Paul. Creo que el investigador tiene que tener en consideración la posibilidad de ir a editoriales y publicaciones no académicas, pero estando claro que las exigencias a sus textos serán diferentes. Adaptar una investigación a una publicación no académica es un trabajo difícil, pero que vale la pena hacer. Muchos saludos
Yajaira Freites
mayo 23, 2021Excelente texto que muestra las exigencias de escribir para otros: pares/árbitros/cientìficos y hacerlo para un pùblico «medianamente culto» con deseo de conocer.
Marcel Roche, mi maestro, decìa que era necesario combinar la rigurosidad con lo ameno; a él le horrorizaba por ejemplo esos textos de las ciencias sociales plagados de conceptos (en ocasiones solo entendibles para los seguidores de una teoría).Por eso a los investigadores en los Estudios Sociales de la Ciencia, nos instò a escribir no solo para los colegas, pero en especial para la comunidad científica ( de físicos, médicos, matemàticos etc), y el público en general. Sus consejos incluía aspectos como el título del texto… mucho de nosotros le debemos a èl escribir más o menos bien.
Roche tambièn escribió textos de divulgaciòn científica ( Mi compromiso con la ciencia, MonteAvila Editores, 1987, p.e.) y pude constatar que era un proceso distinto al escribir un texto para los científicos. Su capacidad de comunicar en forma escrita fue importante para construir la cultura cientìfica del IVIC,,,,
Hay colegas que son excelentes en sus exposiciones y conferencias y ello parece estar conectados con los textos que escriben. Un maestro en ello, fue Josè Agustìn Silva Michelena… cuando aun leo sus escritos, me parece estarlo oyendo… que sencillez, pero que profundidad.
Pero por experiencia, sé que es distinto un texto para una conferencia que el de un artículo cientìfico. Hay que partir de una perspectiva distinta… y no todos están dispuesto a ese trabajo, pues ya entre nosotros llegar al texto cientìfico (después de enfrentar los avatares del trabajo experimental, de campo o de archivo) es una proeza, enviarlo a una revista arbitrada, pasar el arbitraje y lograr que lo publiquen es toda un esfuerzo….que sencillamente consume mucho esfuerzo.
Aun asì, hay mucho que aprender y por supuesto hay que recurrir a los que saben y rodearnos de especialistas.
Luis Alejandro Ordóñez
mayo 30, 2021Gracias por comentar, Yajaira. Sí, cambiar de perspectiva no es sencillo. Sobre todo porque, como dice, el proceso de publicar en revistas arbitradas es largo y exigente. Asumir otro proceso que también es largo y que presenta exigencias diferentes puede resultar agotador. Pero la mirada ajena, mirada especializada, puede dar esa perspectiva y abrir caminos que hagan el trabajo más fluido. Saludos
Leonardo Picón Lobo
mayo 23, 2021Las publicaciones científicas tienen grandes retos cuando les interesa llegar a ámbitos más allá de su público segmentado. Es allí cuando la industria editorial puede dar grandes aportes para que la ciencia y la investigación llegue con gran interés y alguna mente curiosa termine generando conocimientos útiles e importantes.
El desafío es permanente.
Los retos ahora se ven reflejados en las computadoras, porque la producción en papel por distintas causas tocó su techo y ahora está disminuida. Y hace falta personas como Carl Sagan, Stephen Jay Gould o Pedro Trebbau en ámbitos digitales.
Luis Alejandro Ordóñez
mayo 30, 2021Gracias, Leonardo, por comentar. Sí, ese desafío es permanente porque siempre habrá nuevas demandas, nuevos públicos, nuevos métodos y nuevos medios. Pero es un desafío que vale la pena enfrentar. Saludos,