En el marco del X Foro Invertido, el investigador Alfredo Poggi reflexiona sobre la crisis de las humanidades en las instituciones de educación superior y los tres principales movimientos intelectuales «responsables» de esa situación y propone una vuelta a los modelos clásicos y humanistas.
A continuación, el resumen de la ponencia.
¿Para qué sirven las humanidades? La encrucijada de las universidades entre el marxismo postmoderno, el pragmatismo economicista y el positivismo eurocéntrico
Alfredo Ignacio Poggi
Associate Professor
University of North Georgia, US
En mi exposición, presentaré los tres principales movimientos intelectuales, que, en mi parecer, condujeron a las humanidades al estado de crisis actual: el marxismo postmoderno, el pragmatismo economicista, y el positivismo eurocéntrico. Primero, después de los fracasos políticos de la izquierda en los años 60 y 70, el marxismo se reconstruyó desde las académicas occidentales, y adquirió componentes postmodernos (especialmente de Nietzsche, Foucault y Derrida). Aunque aportó herramientas críticas de análisis, esta tendencia conquistó casi completamente las humanidades occidentales y las redujo a un mero ejercicio de develación de las mecanismo de opresión, de las voluntades de poder y sus discursos legitimadores. Segundo, otro movimiento intelectual paralelo, viendo los éxitos de las economías globales, ha enfatizado la necesidad de adaptarse a los mercados y buscar resultados pragmáticos inmediatos, dejando a las humanidades aisladas y realizando un rol que no le corresponde. Finalmente, bajo la idea cientificista de las divisiones disciplinarias y especialistas, otro sector más pequeño de las humanidades sobrevive bajo el justificativo de nichos de estudio, lejos de los debates públicos y las necesidades de las sociedades actuales. Estos movimientos, a su vez, tienen una tendencia de consumir todas las nuevas ideas y pensadores que provienen de los centros europeos y norteamericanos (especialmente Estados Unidos y Francia), independientemente de su calidad y relevancia para otros contextos. Para finalizarse, propongo la necesidad de volver a los modelos clásicos y humanistas en los departamentos de humanidades, en los cuáles se les brinda a los estudiantes modelos interdisciplinarios para “vivir bien” en comunidades sociales y políticas, aprender el disenso y la argumentación, saber filtrar el flujo constante de información que les llega a través de los algoritmos de los social media, y reconocer la dimensión trascendental de la vida humana.
Palabras clave: humanidades, marxismo, pragmatismo, economicismo.
Boletín InterConectados diciembre 2024
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